Por todos es conocida la importancia de llevar a cabo una correcta higiene íntima. En el caso de las mujeres, un adecuado lavado vaginal ayuda a evitar infecciones recurrentes que pueden llegar poner en peligro la salud. Esta entrada de blog descubre cómo lavar correctamente en casa toda la zona vaginal, incluida la vulva.
La importancia del lavado vaginal
No saber a ciencia exacta cómo realizar un lavado vaginal puede conducir hacia un déficit o a un exceso que perjudique a las zonas íntimas del cuerpo de la mujer. Aunque pueda considerarse que ser muy higiénico es algo beneficioso, en el caso de la vagina sucede lo contrario. Este área vaginal es extremadamente sensible, y requiere de grandes cuidados. La alteración hormonal, el exceso de humedad y una higiene íntima deficiente pueden alterar la flora vaginal, tan sensible a cualquier cambio, hasta provocar diversas infecciones. Es por ello que es esencial poseer los conocimientos necesarios para realizar de manera correcta el lavado vaginal sin que ello perjudique. Es entonces cuando entran en juego tanto los productos a utilizar como la manera de hacerlo. Todo es fundamental en este proceso, y ello puede llevar a descubrir años de malas prácticas en lo referente a la higiene íntima y a posibles infecciones que ha surgido con el paso del tiempo.Pasos para realizar un correcto lavado vaginal
Teniendo en cuenta las diversas premisas a cumplir para que la higiene íntima femenina sea la adecuada, el lavado vaginal consta de los siguientes pasos:- Hay que tener presente que una limpieza íntima es básica y ha de realizarse diariamente. Eso sí, sin excesos: una vez al día es suficiente.
- Se debe realizar el lavado vaginal de adelante hacia atrás, nunca al revés, para no trasladar los gérmenes de la zona anal. Para secarse, se hará de la misma forma, asegurando dejar la zona bien seca en todos los pliegues, con una toalla limpia que deberá ser de un único uso.
- Se recomienda usar simplemente agua o, como mucho, un jabón específico con un pH neutro indicado para dicha área y para el tipo de piel de la mujer en cuestión.
- Olvidar las duchas vaginales: la limpieza solo debe realizarse en la zona externa.
- Se debe evitar el uso de desodorantes íntimos. Además de provocar irritaciones y alergias, pueden enmascarar el mal olor vaginal.
- Evitar el uso de esponjas. Es preferible utilizar las manos, siempre los más limpias posible.
- No frotar bruscamente. Es un área muy sensible y requiere un cuidado especial.
- Intentar no usar pantalones muy ajustados. Se aconseja usar ropa interior de algodón, teniendo en cuenta la sensibilidad de la zona, y mantener las prendas íntimas en un lugar limpio, fuera del contacto con otra ropa.
- Durante la menstruación no es necesario asearse más que otros días. Si se utilizan tampones, conviene cambiarlos cada cuatro horas para evitar la humedad, y, por supuesto, no dormir con ellos.
- También es recomendable lavar bien la vulva y, en resumen, toda la zona íntima después de mantener relaciones sexuales y de orinar, para eliminar posibles gérmenes.