Pero ¿qué son las hemorroides?

También llamadas «almorranas», las hemorroides son venas de la zona anal que se inflaman o dilatan y adquieren un aspecto parecido al de las varices. Cualquier persona puede padecerlas sin saberlo, ya que no presentan síntomas en un principio; sin embargo, cuando las primeras molestias hacen acto de presencia, es el momento de acudir a un médico o especialista y tratar de ponerles solución con las distintas curas para las hemorroides que existen hoy día, ya que pueden convertirse en un problema crónico.

Tipos de hemorroides

Dependiendo de su localización dentro del conducto anal, se puede decir que hay tres tipos de hemorroides:

Hemorroides internas: cuando las venas afectadas se encuentran en la zona baja del recto, justo encima del ano, y están recubiertas por la mucosa rectal. Se clasifican en cuatro grados:

  • Grado I
    Formaciones iniciales sin prolapso (desplazamiento) exterior.
  • Grado II
    Principio de prolapso externo al hacer esfuerzos durante las deposiciones. Se reintroduce en el ano de forma espontánea.
  • Grado III
    Prolapso externo al hacer las deposiciones; se reintroduce con ayuda manual.
  • Grado IV
    Prolapso externo permanente, su reintroducción en el ano es complicada y normalmente se vuelven a reproducir.

Hemorroides externas: cuando las venas se localizan debajo de la unión del ano con el recto y están cubiertas por el epitelio escamoso. Se suelen reconocer porque se presentan de forma individual o múltiple y no manifiestan ningún síntoma; sin embargo, cuando se complican pueden provocar picor, dolor intenso e incluso dar paso a la aparición de coágulos de sangre, también llamados hemorroides trombosadas.

¿Cuáles son sus síntomas?

Existen una serie de síntomas que nos indicarán si ha llegado el momento de pedir ayuda profesional:

  • Restos de sangre fresca en el inodoro o en el papel higiénico después de cada deposición.
  • Sensación de ocupación o bulto en la zona del ano.
  • Picor.
  • Dolor.
  • Prolapso o salida al exterior de la hemorroide.

Ante la aparición de cualquier de estos síntomas, no dudes en acudir a tu médico de cabecera o especialista. Si no intervienes con prontitud, las hemorroides pueden llegar a convertirse en un problema patológico denominado «síndrome hemorroidal».

¿Por qué se producen?

Entre las causas que más relación tienen con la aparición de las hemorroides, tenemos las siguientes:

  • Antecedentes familiares.
  • Estreñimiento o diarrea.
  • Permanecer mucho tiempo de pie o, por el contrario, demasiado tiempo sentado.
  • Embarazo, especialmente en las últimas semanas debido a la presión del útero sobre las venas de la zona anal.
  • Menstruación, por acción de los estrógenos.
  • Exceso de grasa abdominal, debido a la presión que ejerce sobre las venas hemorroidales y del pubis.
  • Dieta baja en fibra, verduras y frutas.

¿Cómo puedo curar las hemorroides?

Hay muchas maneras de prevenir las hemorroides, las más habituales y recomendadas por los especialistas consisten en llevar una alimentación rica en fibras, verduras y frutas, beber entre uno y dos litros de agua al día, reducir el consumo de sal, practicar ejercicio de forma regular, cuidar la postura evitando pasar muchas horas de pie o sentado y no hacer esfuerzos al defecar.

Sin embargo, si a pesar de seguir todas estas recomendaciones no has logrado evitar su aparición, debes saber que existen muchos remedios para las hemorroides, como por ejemplo:

  • Los llamados «baños de asiento», que consisten en sumergir la zona afectada en agua tibia o fresca, mezclada con infusiones de manzanilla o castaño de indias, por ejemplo, durante 10 o 15 minutos.
  • Aplicar hielo en la zona afectada para aliviar el dolor, el picor y la inflamación.
  • Tomar analgésicos por vía oral.
  • Utilizar productos específicos para la higiene y el alivio de los síntomas después de cada deposición.

Este último remedio es más importante de lo que parece. El uso de productos elaborados por laboratorios especializados en el tratamiento de esta afección, como Hemoal, puede evitar que las hemorroides se conviertan en un problema crónico. Si después de cada deposición combinas la limpieza que proporcionan las toallitas higiénicas de esta marca con la aplicación de su pomada rectal Hemoal Forte, obtendrás alivio inmediato y duradero del dolor, el picor y el escozor asociado a esta afección común tan molesta.

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