Tobilleras

¿Qué son las tobilleras ortopédicas?

Los pies cumplen una función vital en la vida diaria. Mantienen la estructura y posibilitan el movimiento. Las molestias en el pie pueden provocar dolores intensos al andar y en cualquier otro movimiento forzado. Las tobilleras son muy efectivas sobre todo para evitar esguinces y otras lesiones, protegen la articulación, ya que facilitan un apoyo del pie constante. Hay muchos tipos de ortesis de tobillo que varían en forma y tamaño en función de las necesidades de cada usuario. Las tobilleras se adhieren al pie y comprimen el tobillo reduciendo el riesgo de padecer contusiones. Además, dan un soporte adicional a los músculos del tobillo, ayudando a mejorar la estabilidad y el movimiento.

Las tobilleras ortopédicas, o las ortesis de tobillo, son unos accesorios creados para tratar las lesiones producidas en la zona del pie. Se utiliza, generalmente, en los procesos de rehabilitación de las personas que han sufrido algún tipo de lesión articular en el tobillo. Tienen como función principal prevenir y aliviar los dolores del pie y tobillo.

¿Qué tipos de tobilleras ortopédicas existen?

Existe una amplia variedad de tobilleras ortopédicas en el mercado. La mayoría presentan las mismas características, sin embargo, pueden encontrarse en diferentes tamaños, materiales y, están indicadas para cubrir las diferentes necesidades y dolencias que padece cada usuario. Las tobilleras ortopédicas están confeccionadas generalmente de materiales termoplásticos de alta y baja temperatura. Son resistentes, transpirables y cómodas. Existen tobilleras de diferentes colores. Por lo general, no se suelen utilizar colores llamativos, sino más bien, se usan tonos neutros para conseguir una mayor discreción, como el negro, el gris, o los tonos color carne.

Dependiendo del grado de lesión, las tobilleras tendrán un papel u otro en el proceso de recuperación. Si el esguince es de primer o segundo grado conviene utilizar tobilleras elásticas o con férulas durante unas semanas. Estos accesorios están indicados para los procesos de rehabilitación y, suelen ser de materiales elásticos como el nylon, ya que permite una mayor adaptación en los movimientos. Si el esguince es de más grave, conviene utilizar tobilleras con una función inmovilizadora, que permita limitar la movilidad del tobillo para evitar forzar la articulación.

Las tobilleras aportan seguridad al movimiento; aumentan la estabilidad al mover el tobillo; mantienen el calor y comprimen la zona afectada para mantener la circulación. Además, ayudan a relajar la musculatura y reducen las molestias en el pie. Sirven para cualquier persona, hay algunas que no tienen ninguna talla, pero se ajustan fácilmente con sistema de agarre como velcros o cintas. Para escoger una tobillera con una medida adecuada. Los centímetros del contorno del tobillo sirven para comprobar la talla de tobillera que se necesita.

¿Cuáles son las lesiones de tobillo más comunes?

Los esguinces de tobillo son lesiones muy habituales, no solo en deportistas, sino en todo tipo de personas. Se producen, generalmente, debido a un movimiento indebido que provoca una lesión articular en los ligamentos del tobillo. En estos casos, la articulación que une los huesos, tibia, peroné y astrágalo, puede verse muy afectada.

Algunos de los trastornos más comunes que pueden causar molestias en el pie o en el tobillo pueden ser principalmente por esguinces, torceduras y otros tipos de traumatismos en la zona del pie.  Algunas patologías en los músculos también pueden provocar también dolores en los tobillos como los derivados de la tendinitis de Aquiles; la tendinitis del músculo tibial anterior; la tendinitis de los músculos peroneos y, la tendinitis de los músculos flexores dorsales.

Las contusiones son las lesiones más populares de tobillo. Dependiendo del tipo de contusión que se presente y en función de su gravedad, se utilizaran unos dispositivos de rehabilitación u otros. Existen tres grados de lesión en los tobillos:

-          Grado I: es la lesión más leve y se genera cuando se produce un desgarro pequeño de los ligamentos. El dolor no provoca perdida de movilidad o inestabilidad. Se debe, también, a un sobreestiramiento del ligamento con micro-roturas.

-          Grado II: es una lesión moderada que provoca cierta inestabilidad y contracturas musculares. Se produce una rotura parcial del ligamento.

-          Grado III: es una lesión grave, se produce la rotura total del ligamento. Tiene que ver con traumatismo por movimientos muy exagerados que superan la amplitud de la articulación. Provocan gran inestabilidad y dolor.

Los métodos y aparatos destinados a la rehabilitación tendrán como objetivos principales reducir el dolor y la inflamación; mejorar el movimiento y la estabilidad del tobillo; mejorar su fuerza en el caso de debilitamiento de los músculos; mejorar la resistencia; mejorar el equilibrio y la agilidad.

¿Dónde comprar tobilleras ortopédicas?

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