Tenga

La filosofía de Tenga es normalizar el deseo de placer: hablar con otras personas sobre ello, sin tabús, e incluso utilizar productos que nos ayudan a disfrutar más, a sentir más. La revolución, para Tenga, es acabar con esa visión lujuriosa u obscena de la sexualidad, para normalizarla como algo natural.

Tenga fue fundada en el año 2005, por Koichi Matsumoto. Koichi Matsumoto estuvo trabajando como empleado de la automoción hasta que, a los 34 años, decidió emprender. Tras varios intentos, y cuando ya los ahorros habían descendido considerablemente, se decidió a hacer algo en el sector de los productos para adultos. Fue entonces cuando creó Tenga. Sus primeros productos tuvieron un impacto muy positivo en el mercado, llegando a superar el millón de unidades vendidas en el primer año.

Los huevos masturbadores de Tenga son un producto sexual contenido en un envase de ‘huevo’, que en su interior contiene una silicona muy flexible, también en forma de huevo, pero con un extremo abierto. Por ese extremo es por donde se introduce el pene, estirando la silicona hasta cubrir buena parte del mismo, arropándolo. Cada envase contiene una porción de lubricante para utilizar, y cada huevo de silicona presenta un diseño distinto en su interior, para provocar distintas sensaciones. Es un producto elaborado con un elastómero de grado médico (TPE), hipoalergénico y adaptable a penes de cualquier tamaño.

Son numerosos y distintos los huevos masturbadores que Tenga ha diseñado. Como te decíamos, cada uno presenta un diseño interior distinto, para provocar diferentes sensaciones al masturbar y siempre el máximo placer.

Puedes encontrar huevos con diseños interiores como rizos ondulados, tela de araña, espiral, estructura dividida que ‘atrapa’ o estrías en forma de rayo, entre otras.